Páginas

miércoles, 10 de julio de 2013

Tú, Yo, Ego.

Aquí os dejo un poco de mis pensamientos más oscuros, de mis quebradero de cabeza. Aquí os dejo un poco de Filosofía en puro estado. No pido que os guste o que lo entendáis, sólo que tratéis de comprenderlo y que os haga pararos a pensar un poco.

El ego es una representación no física, no tangible de lo que somos. Al ser una representación se comparte, creando una imagen de lo que somos. Al igual que varía nuestro ego, varía nuestro yo. Por tanto el yo y el ego van unidos. Si el yo se ve afectado por diversas emociones estas afectaran a su vez a la representación de nuestro yo, i.e., al ego.
Por lo que se podría decir que el ego es la exaltación de nuestro yo.
Pero hay con lo que se relaciona al ego y es el concepto de Narcisismo. El termino Narcisismo es un término bíblico basado en la historia de Narciso quien mirando a su reflejo en un lago y admirándose dejó de comer durante días, hasta que se desmayó y murió ahogado en el lago.
¿A donde quiero llegar con todo esto?
Como he dicho el ego es la exaltación del yo, pero el narcisismo es la admiración del yo, del yo como persona de yo como ente físico y tangible. El narcisismo influye fuertemente en nuestro ego de manera indirecta a causa de interpretaciones erróneas. No por aclamar lo contento, feliz y bien que te encuentras un día significa que te "amas" mucho sino que tu ego, esa representación de tu yo, es feliz, está contento y se encuentra bien.
Cada sentimiento va ligado a una expresión del ego, es decir, una persona triste o decaída hace que su ego sea silencioso y a penas perceptible, pero no significa que su ego desaparezca.
Por tanto el ego es una representación no física, una exaltación del yo, mientras que el "ego" narcisista es una admiración del yo.
Pero el ego no es solo la representación del yo, sino también interviene la interpretación del "tú" es decir, se puede ver modificado por como es interpretado tu ego por otras personas.

Al fin y al cabo, nuestro yo es como es, gracias a la visión que tienen de ti la gente alrededor.

¡Feliz Verano a todos!

¿Sólo yo me pregunto sobre cosas como estas?

viernes, 21 de junio de 2013

Heartstorming

La tormenta llega tras la calma.

Siempre hay buenas rachas y malas rachas. Grandes comienzos y grandes finales.
Saber que en cualquier momento todo puede estropearse no es lo que se busca. Buscas la felicidad y la alegría. No intentas luchar por lo que quieres para que al final se derrumben tus ideales.
Cuando llevas una ilusión dentro y sientes que todo da igual, te ciegas tú solo. Pero realmente no te importa. No te importa lo que piensen los demás, no te importa lo que digan los demás, no te guías por la opinión de los demás, te mueves y actúas como realmente quieres, sin reprimirte y sin arrepentirte. 


Si lo haces mal que así sea pero que nadie diga que no lo intentaste. 
Todo tiene un por qué y si se enfadan es porque les importas.
Si se entristecen es porque les importas más aún.
Si lloran es porque no hay otro pensamiento en su cabeza.
Si muestran indiferencia es que no vale la pena.
Si expresan melancolía... Melancolía es el disfraz de la tristeza para quien no puede verte.


Cuando ves venir que algo malo puede haber o cuando simplemente crees que aparecerá. Cuando te convences a ti mismo de que algo malo viene detrás, no te das cuenta de que no estas siendo tu mismo. No ves que quizás quien vaya a aportar ese mal grano de arena seas tú y no la otra persona, por el simple hecho de no entregarte como eres (aunque no seas consciente de ello).
Pero aún en las malas, párate y piensa en quién está contigo cuando estás triste o enfadado. Incluso párate a pensar si con quién estés triste, decepcionado o molesto sigue estando contigo.
Párate y mira hacia atrás, contempla todo lo que has podido ser y lo que eres, mira atrás y aprende de lo que has hecho. No te arrepientas por lo que has hecho, sino de lo que pudiste haber hecho.
Si alguna vez te arrepientes de algo que hiciste, es porque no lo hiciste de verdad, no lo hiciste siendo tú y poniendo tu empeño.
Mirar hacia atrás no es vivir por el pasado. Mirar atrás es vivir con el pasado para mejorar el presente. 

Atrévete y arriésgate, nunca sabes lo que puede pasar cuando es tu cuerpo quien mueve tu cabeza o cuando tu corazón guía tus movimientos.
Aunque eso sí, no es lo mismo que tu corazón gobierne a que tus vísceras lo hagan. Las pasiones son la esencia de las oportunidades, al igual que los impulsos su peor enemigo.
Disfruta de lo que tienes, vive por lo que quieres, sueña por lo que deseas.

-Sweet Summer-

Siento que no haya nada claro en lo que escribo y sean pequeñas ideas sueltas, pero cuando te paras a escribir y hay mucho de lo que quisieras hablar, se hace difícil centrarte en una sola cosa.
Espero que os guste y os deseo un feliz verano a todos.

miércoles, 5 de junio de 2013

El Señor Tiempo

Tiempo es el señor que nos gobierna.
Tiempo es el señor que nos guía.
Tiempo es el señor que nos dice que hacer.
Tiempo es el señor que nos amedrenta.
Tiempo es el señor que nos divierte.

Te lo estas pasando bien y el tiempo a tu alrededor parece que se hubiera acelerado, un simple pestañeo son minutos en el reloj de tu vida. Cuanto menos prestamos atención al tiempo más rápido él avanza. Y es una pena no poder dejar de prestarle atención para siempre. Porque cuando te das cuenta del tiempo que ha pasado te arrepientes de que haya sido tan raudo. Y es que vivimos a merced del tiempo.

Cuando la tarea es tediosa por el contrario el tiempo se alarga, todo va a cámara lenta, te da tiempo a fijarte en los más nimios y singulares detalles de cada instante, a los que estando entretenido, pensativo o centrado en cualquier otra cosa, jamás prestarías atención. 
Te fijas en cómo van vestidos tus compañeros de clase, en lo bueno que hace fuera, en lo que dice tu profesor, en lo que dan en la tele, en tus apuntes, en cualquier mancha de la pared. Miras al reloj y a penas han pasado cinco minutos, a continuación, suspiras y vuelves con la rutina, te fijas en todo, miras el reloj ansiando que hayan pasado al menos un par de horas y lo único que has conseguido es que la manecilla larga del reloj se deslice 2 rayitas. Vivimos a merced del tiempo.

Pero la peor sensación que el Señor Tiempo nos logra imponer es aquella de ser incapaces de alcanzarle. De no tener tiempo, de sentir que se acaba y que no has hecho lo que querías, de ver que tienes tiempo pero no sabes que hacer con el. A veces es tan efímero que se escapa entre nuestros dedos y otras veces es tan grande que se nos hace imposible abarcarlo. 
Luchamos contra el tiempo porque no queremos vivir a su merced. El tiempo es Pasado, Presente y Futuro. El tiempo nos hace pensar en qué será, nos hace ver qué fuimos y nos obliga a ver quién somos. 
No hay nada peor que vivir a merced del tiempo, vivir en lo que fuiste, perderte lo que vives y olvidar qué vivirás. 

-Oh! Señor Tiempo, si no existieras cuantas cosas haría. Nada más que una, vivir. Viviría una sola anécdota, una sola historia, un sólo momento. 
-Oh! Señor Tiempo, si no existieras en qué poco pensaría. Ni en qué he sido, ni en qué seré. Simplemente sería.
-Oh! Señor Tiempo, qué feliz soy cuando por un momento me hace olvidar tu existencia.

Siento haber estado ausente tanto tiempo, doy la bienvenida al mes de Junio con esta enrevesada entrada. Espero que os guste y gracias por leerlo.


miércoles, 1 de mayo de 2013

Sin cero

Cuando dices más de lo que piensas, pero no dices lo que piensas...
Todos sabemos que la comunicación no consta sólo de hablar. Hay gestos, reacciones que pueden decir más que lo que se está expresando en ese momento con palabras. Pero estos también pueden llevarte a equivocación, pueden confundirte. Pueden no querer decir nada y tú buscarle algún significado que realmente no está. Es como querer pegar un ojo a la pared para ver que hay detrás. Por mucho que mires no habrá nada más allá.
Pero esto no es malo, simplemente no es real. La forma de llegar a esas conclusiones, de obtener esas ideas, es sincerándote. Pero no con nadie, no necesitas hablar con nadie para lograrlo, lo que necesitas es sincerarte contigo mismo.
Es por eso que muchas veces te haces ver a ti mismo que eso es o no lo que quieres, te "logras" convencer para que de repente un día veas como al final te convenciste de lo erróneo.
Hasta que no te paras a hablar contigo mismo sobre qué es lo que de verdad piensas no puedes ser feliz.
Hasta que no escales esa montaña que lleva a tu soledad y hables con ella, os miréis a los ojos y os digáis lo que de verdad piensas tú y sólo tú. No lo que crees que piensan el resto, lo que quieres que piensen o lo que pueden llegar a pensar.
Pararte a serte fiel y serte sincero. Pararte a ver por un momento que estás a gusto, que estás liberado que te sientes fiel a esas ideas, que son profundas y verdaderas.
No hablo sobre meditar y pensar sobre posibles situaciones para llegar a tomar una u otra decisión. Toda nuestra vida gira en torno a las decisiones que tomamos y en base a las cosas que decimos y a quién se las decimos.
De lo que hablo es de abrir tu corazón y ponerlo al nivel de tu mente, ser uno, ser sincero contigo mismo. No engañarte u ocultar tus pensamientos con otros o con ese gran dragón llamado ¿Y si...?, no tener que pensar todo lo que haces en función de como repercutirá en el resto.
Habla con quién más te conoce, quién aguanta tus penas, tus amores, tus alegrías, quién soporta tus quebraderos de cabeza, con quien te ha visto llorar de amor, terror, tristeza e impotencia, quien siempre va a estar ahí sin importar que no te acuerdes de él, con quién siempre puedes contar porque siempre estará ahí. Habla contigo mismo, sincerate tú. Y será ahí cuando ni el mas pequeño gesto puede confundirte ni cuando la más pequeña idea pueda hacerte colapsar.
Si no cuentas contigo. ¿Quién lo hará?
Bienvenido Mayo de 2013.
Os dejo además una cita de una película:
"You have to make the right choice. As long as you don't choose, everything remains possible". - Mr.Nobody -

martes, 2 de abril de 2013

Allí se encuentra él

A lo lejos, sentado en el banco del parque se sienta él. Es difícil verle, ya que esta sentado en una esquina, detrás del gran tobogán con forma de caracol, entre dos frondosos árboles. Allí se encuentra él.
A lo lejos, agazapado, observa todo a su alrededor sin perder detalle; cada hoja que cae, cada pareja que camina, cada ave que vuela, cada hormiga que pasa, cada mota de arena que se mueve. Observando con detalle, allí se encuentra él.
Todo le queda pequeño y todo le viene grande. Su cabeza explora mundos más allá de lo real. Imagina situaciones, momentos, personas, criaturas, olores, paisajes, mundos. Imaginando un mundo de posibilidades allí se encuentra él.
Él tiene la capacidad de inventar, fingir, dudar, correr, jugar, ver. Todo ello sentado en la esquina de ese banco. Solitario allí se encuentra él.
Sumido en ideas, ajeno a lo que le rodea pero sin perder un sólo detalle de lo que ocurre. Como si supiera que va a pasar y por eso no le da importancia. ¿Feliz se encuentra él?

¿Quién es él?
Él es sólo él.

Siempre he querido inventarme mi pequeña y propia historia, abstracta y libre de interpretación.
Se hace raro escribir cuando sale sólo y las palabras salen de tu mano antes que de tu cabeza. Es por eso que dejo este pequeño relato con el que ni yo soy consciente que quiero decir del todo.

jueves, 14 de marzo de 2013

Una Historia que te Haga Sonreír

Hoy quiero compartir con vosotros una historia:

Una mujer trabajaba como secretaria en una empresa. Siempre estaba sometida a estrés; rellenar informes, impresos, concretar reuniones, seguir la agenda de su jefe. Y al llegar a casa tenia que cuidar de sus dos hijos, ya que su marido trabajaba. 
En el trabajo estaba de mal humor, discutía con sus compañeros y al jefe apenas le hablaba. Tenía el trato justo como secretaria que era.
Esto le llevo a tener problemas de salud, estrés, cansancio acumulado...
Finalmente, un día se decidió y fue a un Psicólogo. Una vez en la consulta, éste le preguntó que qué le pasaba.
 -Tengo mucho estrés, muchos problemas, siempre estoy de mal humor y además cada vez que voy al trabajo me dan náuseas y eso me hace estar aún de peor humor y en peor estado.
El Psicólogo sonrió y habló con ella. Al terminar, le mandó una tarea:
-Mira, lo único que tienes que hacer es ir a trabajar con una sonrisa en la cara, aunque sea forzada. Tómate todo con una sonrisa. Tienes muchos formularios que rellenar. Hazlo con una sonrisa.
La hora del café en vez de verla como la calma antes de la tormenta. Sonríe y habla con tus compañeros. Y dentro de unas semanas vienes a verme.
Ella se quedó muy extrañada ante tal tarea, ya que de que le iba a servir sonreír cuando lo que ella sentía eran náuseas, jaquecas y siempre estaba cabizbaja . Pero decidió seguir este consejo.
Poco a poco cada día llegaba al trabajo, miraba a su jefe y le daba los buenos días con una sonrisa muy forzada. En el descanso, hablaba con sus compañeros con esa misma sonrisa forzada. 
El tiempo pasó y esa sonrisa se volvió algo automático al hablar con su jefe, al realizar su tarea y al hablar con sus compañeros. Las náuseas pasaron y esas ganas de no ir al trabajo también. 
Por lo que volvió al Psicólogo:
-Parece que mis náuseas han pasado y ya no me molesta tanto ir al trabajo, hasta me parece algo ameno, dijo ella.
El Psicólogo le contestó:
-Eso es por ir con una sonrisa. Estoy seguro que al principio te costaba sonreír y que no era lo que más te apetecía hacer. Pero poco a poco tu sonrisa, aunque fuera falsa incitaba a recibir una sonrisa de los de tu alrededor, lo que a su vez te hacía sonreír cada vez con más ganas y te hacía ver el trabajo como una actividad entretenida y no como una pesada obligación.
Ella atónita se dio cuenta de que todo era cierto. Desde que empezó con esa sencilla tarea de sonreír cada mañana, todo su entorno había mejorado y ella se encontraba de buen humor. Todo ello por una sonrisa.

¿Que es lo que os quiero decir con esta pequeña historia? Es bueno mostrar lo que sentimos, pero también es bueno mostrar lo que queremos sentir. Puede que esté triste por dentro, eche de menos a gente y lo único que quiera es estar en mi casa sumido en mis pensamientos en vez de tener que ir a trabajar o tener que ir a clase. Pero obviamente no nos gusta estar así y es por eso que nos planteamos que hacer. Análogamente esta mujer va a consulta. Notar que por nuestra sonrisa aunque falsa, el resto te la devuelve, hace que quieras dar más de una sonrisa, de modo que tus pensamientos cambiarán y verás como esa pequeña sonrisa cambia tu mundo por uno mucho más feliz y optimista.

Una sonrisa está infravalorada, es por eso que siempre tengo una sonrisa en mi cara, este triste, cansado o furioso, siempre tengo una sonrisa que ofrecerle a todos y cuando consigo sacar una sonrisa a alguien y que me la devuelva, me hace sonreír con más ganas que antes.

Antes los problemas: Sonríe, regálate una sonrisa.

miércoles, 6 de marzo de 2013

Coincidencia o Destino

A lo largo de nuestras vidas tienen lugar muchas y diferentes experiencias, el primer beso, el primer día de clase, el primer viaje, tu primer amor... No todo tiene por qué ser primeras veces. Es cierto que estos momento definen, señalan y marcan nuestras vidas, pero, es en las segundas veces, en las terceras, cuartas, en cualquier otra vez que se repita ese cóctel de pensamientos y sentimientos. Es en esas veces cuando nos planteamos por qué nos ocurren esas cosas, que motor lícito nos ha hecho volver a experimentar de nuevo esas sensaciones.
Es aquí donde surge un dilema entre las Coincidencias y el Destino.

Hay personas que apelan al destino. Todo tiene un por qué, todo está marcado y predispuesto para ocurrir tal y como ocurre. Para la gente a la que, por regla general, le pasan cosas buenas, veo bien que piensen así  pero quién vive en desgracias; no tiene trabajo, no puede estudiar, su pareja le deja. A esas personas no les puedes pedir que crean en un destino que lo único que parece augurar son malas rachas. Es ahí donde entran las coincidencias.Cuando te paras y piensas... Y si me hubiera ido a esta otra universidad, no habría conocido a esta gente y ahora todo sería diferente, pero casualmente ha sido así.
Pensar que por cualquier circunstancia un día te da por hablar con alguien, se le cae un papel, lo recoges, se lo das y habláis un tiempo. Eso se queda ahí  pero al día siguiente o a los días, coincidís otra vez y esa persona te habla y poco a poco día a día seguís hablando y de la forma más simple, ganas un amigo en quien confiar, por ejemplo.
¿Acaso no crees que con la cantidad de personas que transitan nuestras calles, el destino te eligió a ti entre todos para recoger ese papel?
Yo, no lo creo, fue una coincidencia.
Y es que la vida se rige por singulares coincidencias. Por momentos casuales, por situaciones únicas que se dieron por azares.
No puedes tener fe en que todo esta predestinado, no puedes refugiarte en una vida planeada. Tú haces cada momento posible, porque las coincidencias son coincidencias si queremos verlas como coincidencias.

Como podéis ver, doy mucha importancia a las pequeñas cosas, a los pequeños detalles. A esos pequeños pasos que nos han llevado a la felicidad, como fue el primer beso o el primer amor.
Tan bellos fueron aquellos instantes de felicidad que el ser humano muere por volver a experimentarlos.
Y es que la felicidad se ansía, se alcanza, gusta y enamora.
Cuando el hombre sobreponga la felicidad de alguien por encima de la suya propia, es entonces cuando hablamos de amor. Su felicidad, se convierte en la tuya.

Muchas gracias por leer mi blog, el cual cada dia tiene mas lectores cosa que me alegra mucho. Espero que os haya gustado.

domingo, 3 de marzo de 2013

Música: El Guión.

A veces queremos expresarnos y no sabemos como. Por mucho que tengamos el guión preparado y sepamos palabra por palabra que queremos decir, cuando te ves en el momento y confiado abres ese guión que traes escrito, te das cuenta de que no hay ni una sola palabra escrita, y en el caso de que haya algo escrito no serán más que palabras sueltas, frases cortas, pero nada parecido a todo lo que quieres decir. Ese emotivo discurso se desvanece y te quedas solo ante los focos.

Tu cabeza no deja de dar vueltas y comienza a saber exactamente que tenías escrito, pero misteriosamente no le apetece darle esa orden a tu boca y tu voz no se manifiesta, por lo que vuelve a ti esa ligera impotencia: Todo lo que querías decir desaparece, ahora vuelve a tu cabeza pero no tiene pensado salir. Ha encontrado un sitio donde cobijarse entre recuerdo y recuerdo.
Formulas palabras sueltas, frases cortas y muletillas... Ya sabes... Es que... No se... Lo que quiero decir es...
Está claro que esa persona no sabe. Que obviamente no es nada. Que tu en realidad si sabes y que lo que quieres decir, realmente, es lo contrario a lo que estés tratando de decir en ese momento.

Pero tenemos la suerte de tener guiones a nuestro alrededor, de los que podemos pedir prestado frases, pensamientos e ideas, que de manera indirecta nos ayudan y nos sirven día a día para sentirnos identificados, para levantarnos el ánimo o para transmitir algo. Esos guiones, son música.


-You are each one of my thoughts-

miércoles, 13 de febrero de 2013

Just Valentine

Un te quiero no es nada al lado de un gracias...

Nunca he sido partidario de esta fecha, más bien, me parece un sinsentido depender de un día para que tus muestras de afecto aumenten, para sentirte triste por estar sólo o misteriosa y sorprendentemente, enamorarte este exacto día, declararte a la persona que te gusta o ser ese galán.

Todos los días son el mejor día para acercarte a alguien y dedicarle un te quiero, un me gustas, un gesto, un detalle, una sonrisa. Una mirada.

Todos los días son el mejor día para enamorarte, para ser feliz, para estar con ese amigo querido o ese familiar. El amor no es sólo para esa pequeña persona que ocupa tus ideas y pensamientos, además hay que compartirlo con toda esa gente que se preocupa por ti y por la que tú te preocupas.

Todos los días son el mejor día para sentirte sólo, el único problema es que en el 14 de Febrero, ese misterioso amor multitudinal, entra en una ebullición constante y crea expectativas:
Para los enamorados, expectativas de recibir un regalo o de que guste el que vas a dar.
Para los solitarios, expectativas de quedarse siempre solos o expectativas para justo en ese día, salir y buscar a esa persona (Como si en el 13 de Septiembre no pudieras encontrar a esa persona especial).


No deberíamos depender de un día para demostrar, proponer, para encandilar o enamorarnos.
Todos los días son el día. Tienes que hacer ese día, tienes que ver, crear y fijar el momento que tu quieras que sea especial, no porque lo diga el resto.
Así que manifiéstate cuando quieras, el 14 de Febrero, no es más que otro de los días en los que hacerlo...


Como una pequeña persona que conozco dijo: -San Valentín no es más que un día para decir de una manera sutil quiero follar.

lunes, 28 de enero de 2013

La Paradoja:

He decidido no pensar...
He decidido no pensar, ya que pensar acarrea dudas y lleva a más pensamientos, estos derivan en otros, que a su vez, pasan a formar otros aún mas complejos. Creando asi una enmarañada red de pensamientos, cuando todo esto que tienes pensado, se puede desmontar con un simple chasquear de dedos. Tan sencillo como que algo cambie y todo lo que tenías pensado se vaya al traste. Pero estos pensamientos caídos no se desvanecen sin más, sirven de sustrato para los nuevos pensamientos y comederos de cabeza acarreados por ese imprevisto.
He decidido dejar de pensar, porque actuar es la manera inteligente de pensar. Suena paradójico, pero cuando actúas las cosas pasan. Estas cosas llevan a otras y estas a su vez a otras, siempre y cuando actues sin miedo. Y esta red de accciones y situaciones, no es mas que esa red de pensamientos llevada a cabo, materializada. La diferencia es que ésta ya ha ocurrido y nada puede cambiarlo.
Podemos pasarnos la tarde chasqueando los dedos hasta que nos sangren las yemas de los dedos, que nada cambiará, nada nos decepcionará y nada nos hará volver al principio.

Para que esto ocurra, el miedo al fracaso, las dudas, el ser rechazado. Todo esto tiene que aparcarse a un lado y decir: - Al menos lo intenté
Hasta las decepciones son buenas.

viernes, 18 de enero de 2013

Sabes que eres tonto cuándo...

Tantas situaciones son las que nos llevan a plantearnos nuestro nivel de tontuna o tontez... Bueno, como se diga. Esas veces que te quedas con la cara desencajada: Mirada perdida, cejas medio arqueadas, los labios bajan ligeramente y dan esa sensación de llegar a abrirse pero sin hacerlo. Justo en el momento culmen cuando en una décima de segundo tu cara forma este cuadro, viene un pensamiento a tu cabeza: Soy tonto.
Lo peor de todo no es la cara o el ridículo que hagas, es que te das cuenta de ello y es demasiado tarde para arreglarlo.

Otras veces, cuando algo te satura y le das millones de vueltas; ese ejercicio de Matemáticas, el problema de Física, el trabajo de Biología y tras pasarte toda la noche en vela dándote de cabezazos contra la mesa, mirando al techo, reclinándote en la silla, resoplando y maldiciendo todo lo que se pueda maldecir, llegas a clase al día siguiente, preguntas a tus compañeros y resulta que es lo más sencillo del mundo. Es ahí cuando momentáneamente tu cara se transforma y piensas: ...Soy tonto.
Pero no todo son situaciones prácticas, hay otro tipo.
Esas veces que desaprovechas la oportunidad de tu vida, como por ejemplo: comprarte unos pantalones antes de que pasen las rebajas... No, bromas aparte, me refiero a esas veces que estás con alguien que te gusta y por el qué pensará desaprovechas la oportunidad de darle un beso o de decirle me gustas, o todo lo contrario, ser el último mono y cuando surge el momento, no plantar cara a los que se lo merecen. En este caso no te das cuenta al momento, sino horas o días más tarde, cuando te paras y piensas... Soy tonto.
En este caso viene acompañado de un leve resoplido, mirada caída y con una ligera negación con tu cabeza como queriendo decir: -No puede ser, otra vez no... Que tonto soy.

Es por esto y otras millones de situaciones, que podría contaros, que somos tontos. Si os contase todas dejaría de ser un blog y pasaría a ser un libro con diversas anécdotas.
Pero he de decir, que gracias a que somos tontos, somos quien somos y mejoramos cada día. Cada uno con sus tonterías.

Y con esta entrada doy la bienvenida al año 2013! Ya más de un año desde que cree este blog y al que intento mantener vivo siempre que puedo. Tenía pensado subir una entrada acerca de como fue mi 2012, pero no sé si lo haré. Además tengo otra a medio escribir por ahí, donde hablo un poco sobre la iglesia...Espero acabarla pronto y subirla, siempre y cuando los exámenes me den tregua.
Muchas gracias por leerlo y: FELIZ 2013